Elaborado a partir de viñedos en vaso de más de 45 años, situados a 300 metros de altitud en la Depresión del Penedès, este espumoso monovarietal de Xarel·lo refleja con autenticidad el carácter del territorio. Con rendimientos moderados de 8000 kg/ha y una crianza mínima de 78 meses con tapón de corcho, ofrece profundidad, elegancia y una burbuja muy fina.
En boca es seco, estructurado y con buena acidez. Combina frescura y complejidad, lo que lo convierte en un vino plenamente gastronómico.